La mancha seca en el green: causas y soluciones

Cómo distinguir la mancha seca del estrés por sequía y cómo tratarla.

Marzo 16, 2022
8 mins

Muchos responsables de céspedes han tenido malas experiencias con manchas secas que aparecen en los campos de golf durante los meses de verano. La utilización de agentes humectantes para tratar estas áreas se ha convertido en una práctica habitual en el mantenimiento del green del campo de golf. Sin embargo, es importante saber distinguir la mancha seca de un simple estrés por falta de humedad.

La mancha seca se define como un área de césped que se seca y resulta difícil que vuelva a recobrar la humedad incluso aunque se apliquen grandes cantidades de agua. Se caracteriza normalmente por la presencia de suelos que repelen en el agua. La causa original por la que el suelo se comporta como un repelente contra el agua suele estar ligada a la actividad de anillos de bruja, así como a la dispersión de materiales orgánicos en la zona radicular como parte del proceso natural de descomposición de la planta.

El estrés debido a la sequía del suelo es diferente, no se produce por la presencia de un suelo con propiedades repelentes al agua sino que la falta de humedad es consecuencia de otros problemas del césped. Por ejemplo, la falta de cobertura en el riego puede producir manchas por estrés debido a la falta de humedad. Un enraizamiento pobre debido a diferentes razones puede ser otra causa del estrés por sequía, que se produce porque la planta no puede absorber el agua aunque esta esté disponible en el suelo.

Muchos observadores estarán de acuerdo en que el problema de la mancha seca parece hoy más presente que hace 20 o 30 años, y una prueba de este fenómeno es el creciente número de productos de agentes humectantes que están disponibles en el mercado para combatir el problema. El número de agentes humectantes continúa creciendo cada año, pero hace no mucho apenas existían unos pocos que se usaban solamente en ciertas ocasiones o en las peores condiciones con suelos hidrofóbicos.

Se cree que actualmente hay más posibilidades de encontrar mancha seca localizada por diferentes razones.

El efecto repelente al agua en la zona radicular ha estado siempre presente hasta cierto punto en los greenes construidos sobre arena. Pero el problema se ha intensificado según se han ido modificando las características de la arena utilizada alrededor de la raíz y en superficie, incluyendo cada vez menos materiales de textura fina. Esto se ha producido tanto por el incremento del juego sobre nuestros greenes como por el estrés al que es sometido el césped. Con el deseo de proporcionar superficies de alta calidad durante todo el año, las alturas de corte se mantienen bajas durante más tiempo y se realizan menos aportes de fertilizantes granulados y agua. Inevitablemente, esto tiene consecuencias sobre el césped y la zona radicular. Cabe señalar que los suelos con propiedades repelentes para el agua siempre continuarán siendo un problema significativo para la mayoría de responsables de céspedes en el futuro.

 

Figura 1. Muestras de césped adyacentes tomadas de una mancha seca (derecha) y normal (izquierda).

 

Las investigaciones realizadas sobre la mancha seca y los suelos con propiedades repelentes han mostrado la presencia de material repelente al agua en la zona radicular. Estos materiales son compuestos grasos hidrofóbicos que pueden atacar a las partículas de arena de la zona radicular y que se comportan repeliendo el agua. Si se recoge una muestra de suelo de una zona con mancha seca o de un suelo con propiedades repelentes, este fenómeno se puede observar perfectamente. Se puede ver cómo el material es ligero, seco y se separa fácilmente (figura 1). El enraizamiento se pone en peligro y el agua se queda en la superficie formando una capa (figura 2). Mientras tanto, el material por encima y por debajo de la zona seca puede ser muy receptivo al agua. La porción de suelo hidrofóbico normalmente es fácil de localizar. Si comparamos partículas de arena tomadas de una zona hidrofóbica con arena de una zona de raíz sana y las observamos al microscopio electrónico, cuando la arena es hidrofóbica, se pueden ver depósitos orgánicos adheridos a los granos de arena (figura 3). Aunque puedan verse depósitos orgánicos en las partículas de arena de los suelos sanos, estos son mucho menores. Estos depósitos repelentes al agua han sido extraídos de la parte hidrofóbica de la zona radicular utilizando disolventes y se han analizado en el laboratorio. Se han identificado lípidos y grasas, que son conocidos por sus propiedades repelentes al agua.

El origen de estos lípidos y grasas que cubren los granos de arena probablemente se debe a múltiples causas. Sin embargo, existen evidencias importantes de que una actividad previa de anillos de bruja puede ser uno de los factores que intervengan, lo que se confirma cuando, a veces, en las manchas secas de los greenes de golf pueden verse anillos y líneas en la superficie provenientes de antiguos anillos de bruja. También, cuando las muestras de césped se recogen donde hay actividad de anillos de bruja y cuando se han incubado en condiciones de humedad, se puede ver que el micelio del hongo crece desde una capa en la muestra que se corresponde con la capa en la que se observa la arena más hidrofóbica (figura 4).

La vinculación de la formación de mancha seca con la actividad de los anillos de bruja y la producción de sustancias repelentes al agua por los hongos de los anillos de bruja se ajusta ciertamente con la experiencia de los responsables de céspedes del Reino Unido, pero es conveniente recordar que puede haber más condicionantes. El suelo repelente al agua existe en la agricultura y en las praderas naturales también en lugares donde no se han encontrado anillos de bruja. También aparecen en otras situaciones como en frutales de cítricos después de los incendios. Otros estudios han indicado que los hongos de los anillos de bruja generalmente no tienen que ver con la formación de materiales repelentes al agua, sino que estos se han producido por la producción de ácidos orgánicos creados durante el proceso de descomposición natural en el suelo. Probablemente hay distintos factores que contribuyen a la aparición de estos suelos.

 

Figura 2. Capa húmeda sobre un área de suelo hidrofóbico.

 

¿Qué se puede hacer para evitar y controlar la mancha seca? El primer paso es identificar su causa principal. Hay que averiguar si existe realmente una capa hidrofóbica o si el césped está estresado por sequía. Se debe revisar el sistema de riego y medir la humedad para ajustar los aportes de agua; además, se deben aplicar prácticas de cultivo adecuadas para intentar mejorar el desarrollo del sistema radicular del césped y evitar cualquier compactación potencial. Pero si el suelo repelente al agua está presente, y esto ocurre en muchos casos, se debe atacar directamente. Hay una serie de estrategias de cultivo que pueden ayudar a mitigar la situación, por ejemplo, la reducción del colchón puede limitar el desarrollo de anillos de bruja. El aporte de materiales apropiados en el suelo y en la superficie ayudará a reemplazar el suelo con propiedades repelentes con material nuevo. Si la mancha seca es severa, se deben reducir las aplicaciones de materiales que contengan sulfato de hierro, ya que este material actúa como secante y podría potenciar la sequedad de las manchas. La macha seca aumenta el estrés del césped, por lo que es aconsejable dejar crecer un poco más la planta y, en lugar de segar, pasar un rulo para incrementar la velocidad de la bola. La conversión de especies aumentando los tipos de agrostis o festuca que desarrollan raíces más profundas en lugar de céspedes de pradera anuales que son más propicias a la sequía es una buena solución a largo plazo.

 

Figura 3. Materiales orgánicos cubriendo partículas de arena en suelos repelentes al agua (izquierda) y suelo con partículas de arena relativamente limpias tomadas de un césped que no está afectado por la mancha seca.

 

La solución inmediata es la utilización de agentes humectantes, y esta es la aproximación que se ha convertido en práctica habitual en el mantenimiento de greenes actual. Es un tratamiento muy efectivo para el estrés por sequía y la mancha seca y para tratar suelos repelentes al agua. Los primeros agentes humectantes se empezaron a utilizar hace más de 40 años y los materiales utilizados para ello solían ser detergentes que no estaban diseñados para greenes de golf. Investigaciones recientes realizadas en universidades y organizaciones comerciales han llevado a la producción de agentes humectantes muy activos que ofrecen tratamientos efectivos para la mancha seca. Los agentes humectantes más recientes pueden reducir la mancha seca hasta prácticamente eliminarla incluso en las condiciones más difíciles con poco riego, falta de enraizamiento o compactación. En muchos casos, es el programa de aporte del agente humectante el que diferencia realmente una superficie de golf de alta calidad, especialmente cuando se combina con bajos aportes de fertilizantes modernos y programas de riego. Sin embargo, hay grandes diferencias entre los diferentes agentes humectantes del mercado, por lo que se debe elegir cuidadosamente el producto que se va a utilizar. Consulte los estudios disponibles y seleccione el producto que mejor se adapte a su situación. Recuerde que con una estrategia programada de aplicaciones de agentes humectantes al inicio de la temporada conseguirá los mejores resultados.

 

Figura 4. Muestra de césped incubado en el que aparece el micelio del anillo de bruja. Nótese que no hay micelio presente en la superficie o en zonas radiculares más profundas.